La enfermedad de Chagas, denominada también tripanosomiasis americana, ha sido calificada de «enfermedad silenciosa y silenciada», no solo por su lenta evolución clínica, sino también porque afecta principalmente a poblaciones pobres sin peso político ni acceso a atención de salud.
Generalmente endémica en países de América Latina, actualmente la enfermedad de Chagas está presente en muchos otros países, lo que hace de ella un problema sanitario mundial.
En esta fecha del año 1909 el Dr. Carlos Ribeiro Justiniano Chagas diagnosticó por primera vez la enfermedad a una muchacha brasileña llamada Berenice Soares de Moura.
Sensibilizar sobre esta enfermedad tropical desatendida, que con frecuencia se diagnostica en sus últimas etapas, y dar a conocer su perfil es fundamental para mejorar las tasas de tratamiento temprano y curación, y para interrumpir su transmisión.
Actualmente existen intervenciones costoeficaces y de base científica, como el cribado (de sangre y órganos de recién nacidos y niños), la detección temprana de casos, su tratamiento inmediato, el control vectorial, la higiene y la inocuidad de los alimentos.
La OMS invita a los países a pasar a la acción y dar a conocer en todo el mundo esta y otras enfermedades tropicales desatendidas.
La propuesta de designar el 14 de abril Día Mundial de la Enfermedad de Chagas fue iniciada por la Federación Internacional de Asociaciones de Personas Afectadas por la Enfermedad de Chagas.
En Venezuela la enfermedad afecta principalmente a los habitantes del medio rural. En las últimas 5 décadas se ha observado una disminución progresiva de la prevalencia, según información de Scielo.
En los años 50 y 60 se ubicó en 44,5%, pasando en la década de los años 70 y 80 a cifras de 15,6% y 13,7%, respectivamente; sin embargo, los datos mencionados para la década de los 80 contrastan con los obtenidos por Acquatella, quienes reportaron una prevalencia del 43,9% en áreas rurales. Para la década de los 90 se reportaron entre el 8,3 y 9,2%.
El primer caso reportado en Venezuela por Enrique Tejera en el estado Zulia (1919), diez años después que Carlos Chagas, en Brasil, descubrió el ciclo epidemiológico de la enfermedad.
El Programa de Control de la Enfermedad de Chagas en Venezuela, ha sido sin duda exitoso, constituye un ejemplo para los otros países latinoamericanos, y la metodología seguida es todavía vigente en focos en los cuales se mantiene un ciclo epidemiológico intradoméstico.
Fuente: OMS